
[reforma] Fiel a su estilo «disonante», el Senador Ricardo Monreal aprovechó ayer una conferencia en la UDEM para afirmar que no es una «corcholata» de Morena para la Presidencia, sino un aspirante normal sin cadáveres en el clóset, y si la elección de candidato en el partido es por encuesta, él no va.
El legislador, que apenas hace unos días empezó a ser reconocido formalmente como la «cuarta corcholata» morenista. dijo que lo mejor sería hacer una elección primaria con debates regionales frente a frente.
«Yo no me sometería a una encuesta», afirmó antes de impartir la conferencia «Reforma electoral y sucesión presidencial».
«Si esto sucede, que digan (que) sólo va a ser la encuesta del partido, que organiza el partido y que cante el partido, yo ahí digo no, yo ahí no participaría».
Tanto en la rueda de prensa como en la conferencia fue cuestionado sobre si podría irse a otro partido.
En ambos casos señaló que, pese al desdén con el que había sido tratado, decidió quedarse en el partido que él fundó, porque Morena no es propiedad de un solo grupo, aunque dijo que la dignidad es su límite.
«Mi permanencia en Morena depende del trato y de la dignidad», respondió luego de que una alumna le preguntó si él pudiera encabezar una ruptura.
«Hasta la dignidad va a ser mi límite, así es de que no quiero decir ‘de esa agua no beberé'».
Sin hacer alusiones directas, Monreal se comparó con los otros tres aspirantes morenistas -Claudia Sheinbaum, Marcelo Ebrard y Adán Augusto López- y afirmó que él nunca ha tenido una denuncia por corrupción o malversación de fondos.
«Yo no tengo cadáveres en el clóset», recalcó.
Sobre el Plan B electoral que será impugnado por el INE, anticipó que posiblemente la Suprema Corte cambie todo y no se sabe cómo quedará.
«Muchas de las leyes van a declararse inconstitucionales», señaló, «no podemos adelantar vísperas sobre cómo quedará el INE, no podemos adelantar ningún juicio sobre eso».