Unos hombres abrieron fuego contra civiles durante un concierto en Moscú, Rusia, provocando la muerte de más de 100 personas.
Anoche, un escenario de música rock se convirtió en escenario de terror cuando hombres armados vestidos de camuflaje irrumpieron en una popular sala de conciertos en las afueras de la capital rusa durante la noche del viernes.
Inicialmente, se informó que unas 60 personas perdieron la vida y más de 100 resultaron heridas en el tiroteo, según reportes de la principal agencia de seguridad de Rusia.
Sin embargo, la tragedia empeoró cuando la agencia estatal de investigación del país confirmó que el número de muertos ascendió a 133.
Mientras los disparos resonaban en el recinto, un incendio se desató en los pisos superiores, intensificándose tras una explosión, según informó la agencia de noticias RIA Novosti.
El grupo Estado Islámico reclamó la responsabilidad del ataque. Funcionarios de seguridad estadounidenses sospechan que el ataque fue perpetrado por el Estado Islámico Khorasan, una facción activa en Pakistán, Afganistán e Irán.
Horas después del inicio del caos, la Guardia Nacional rusa informó que continuaban la búsqueda de los atacantes y la evacuación de personas del complejo. Informes de agencias de noticias estatales señalaron la posible presencia de hasta cinco perpetradores.
El Presidente ruso, Vladimir Putin, reveló que los cuatro hombres implicados en el ataque fueron detenidos mientras intentaban huir hacia Ucrania. Según Putin, estos individuos recibieron apoyo para cruzar la frontera estatal desde el lado ucraniano. Sin embargo, Ucrania ha negado cualquier implicación en el ataque.
Putin condenó enérgicamente el acto como «terrorismo internacional» y expresó disposición para colaborar con cualquier Estado interesado en combatirlo. Afirmó que todos los responsables, organizadores y autores del crimen serán castigados.
Putin prometió: «Identificaremos y castigaremos a todos los que están detrás de los terroristas, que prepararon esta atrocidad, este golpe contra Rusia, contra nuestro pueblo».