El peso mexicano rompió la barrera de las 18 unidades por dólar en el mercado internacional por primera vez en casi 5 años, ante la debilidad de la divisa estadounidense y el mayor apetito al riesgo por parte de inversionistas.
La moneda mexicana se llegó a apreciar hasta 0.75 por ciento respecto a su similar estadounidense, alcanzando un valor de 17.9831, nivel que no se veía desde el 18 de abril de 2018.
«El alto carry del peso, potenciado por un Banxico más restrictivo, la falta de ruido político en comparación con sus pares, su cercanía con Estados Unidos, las remesas todavía fuertes y la tendencia de nearshoring apuntalan a la divisa mexicana.
«Estos factores han reducido la volatilidad del peso y lo han vuelto asimétrico: particularmente resistente al riesgo global más tambaleante y al impulso del dólar en otros lugares», dijo Alejandro Cuadrado, director global de estrategia de divisas de BBVA en Nueva York.
El impulso reciente en la moneda también se produjo después de que el Presidente Andrés Manuel López Obrador anunciara los planes de Tesla de construir una planta de ensamblaje en Nuevo León, lo que subraya el llamado atractivo de proximidad de México.
El dólar se encaminaba el viernes a registrar su primera pérdida semanal desde enero frente a las principales divisas, mientras los operadores digerían los datos económicos internacionales y trataban de calibrar el rumbo de la política monetaria de la Reserva Federal.